¿QUÉ DIRÍA LA SEÑORA JUANITA?

por El Fortín del Estrecho | Edición Nº 246 / Año 24

Chile, fértil provincia…, por ladrones conquistada… y, tanto tiempo, por ladrones gobernada.

Hace muchos años se hacía alarde de que Chile no era un país corrupto, y se les creyó, y finamente era corrupto solapado, hasta que a la dictadura cívico militar se le soltaron las trenzas, se subieron por el chorro y el desparpajo descarado, quedó a la vista, desde ahí, robar al Estado, ha sido algo tan común que se le llegó a llamar «raspados de olla», y esas ollas se preparaba con la cazuela hurtada a los impuestos…, con las utilidades de manejos sucios, incluso con financiamientos en el tráfico de drogas, como los «narco zorros del barrio alto», ellos son intocables.

Hoy tenemos un considerable aumento de ladrones comunes criollos e importados. En toda esta bahorrina politiquera que muestra esa hipocresía viva, todos ellos hablan de combatir esos flagelos. Como les dijo el detective Vallejos: «Ustedes colombianizarán Chile…».

«La política es la más alta de las ciencias y su mayor bien es la justicia y la honradez, por consiguiente un Estado que vele más por los intereses de sus gobernantes, que por los justos derechos de sus ciudadanos es un Estado injusto y corrupto».  «La educación debe ser sin diferencias en común a todos y tener como finalidad el desarrollo moral de los ciudadanos…». Más o menos así, decía Aristóteles.

Cabe la pregunta: ¿Qué podemos hacer cuando la corrupción se apodera del sistema? Tenemos un sistema en el que unos hacen como que mandan y otros hacen como que obedecen: ¡Vista al freeé’! Eso no es democracia

¿Cuándo harán una campaña real y efectiva contra el consumo de drogas? ¿Cuándo se va a legislar el control de consumo para quienes tienen responsabilidades políticas, educacionales, religiosas…, etc? Eso no se toca.

Que entren ladrones al cuartel y te roben los fusiles…»mecaaagoché». Tamos mal, y no es la primera vez que los ladrones andaban de civil.

TODO POR LA AUTONOMÍA POLÍTICA Y ECONÓMICA DE MAGALLANES
SIN PRODUCCIÓN NO HAY SOLUCIÓN…

Antonio S. Deza González
Director