EDUCACIÓN CÍVICA

Del Diccionario de la Política
Norberto Bobbio, Nicola Matteucci y Gianfranco Pasquino.
13ª. Edición XXI Siglo Veintiuno Editores

¿Realmente sabes qué es la libertad? ¿No será que caminas ciego por el libertinaje…, hipnótico?

FELIX E. OPPNHEIM

La palabra libertad, tiene una fuerte connotación eufemista. Por lo tanto se ha usado para cubrir cualquier acción política o institución que pudiera considerarse válida, desde la obediencia al derecho natural o positivo hasta la prosperidad económica. Los escritos políticos rara vez dan definiciones explícitas de la LIBERTAD, en términos descriptivos; pero con frecuencia se pueden extrapolar del contexto definiciones descriptivas. El concepto de libertad se refiere más frecuentemente a la libertad social, que debe distinguirse de otros usos de la palabra tanto en sentido descriptivo como en sentido valorativo. Las definiciones descriptivas de “libertad”, designan estados de hecho determinables empíricamente y pueden ser aceptadas por cualquiera sin considerar los puntos de vista normativos de cada uno en lo que refiere a la libertad. La libertad en sentido valorativo se usa para recomendar más que para describir, en consecuencia, tiene significados diferentes de acuerdo con los diversos modelos éticos en que se inspiran los escritores.
El concepto de libertad interpersonal o social se refiere a las relaciones de interacción entre personas o grupos, es decir al hecho de que un actor deja a otro actor en libertad de actuar en cierto modo. Este concepto debe definirse con referencia a otra relación de interacción, la de la no-libertad interpersonal o social.
1/8
NO-LIBERTAD SOCIAL.
Respecto del actor B, el actor A, es no-libre de realizar la acción X, si y sólo si B, hace imposible a A, la realización de X, o sea punible para A, hacer X. “B hace imposible a A, la realización de X” significa que B lleva a cabo la acción y tal que si A intentase realizar X fracasaría en su intento. Negándole a un ciudadano el pasaporte, el gobierno lo hace prácticamente incapaz de viajar al extranjero y por lo tanto no-libre de realizar esa acción. Respecto de Estados Unidos de Norteamérica, la China comunista es no-libre de conquistar Formosa y viceversa, ya que las fuerzas norteamericanas presumiblemente impedirían la invasión de una de las dos potencias por parte de la otra. Si el Ku Klux Klan, impidiera con la fuerza a los negros entrar en una escuela pública, estos últimos serían no-libres de hacerlo respecto de esa organización, pero no respecto del gobierno. “B hace punible para A hacer X”, significa que si A llevara a cabo X, B realizaría la acción y que castigaría a A. Las sanciones del gobierno en contra de los actos legales son únicamente un ejemplo de punibilidad (posible castigo o multa) entre los tipos de no-libertad social. Respecto de un sindicato una empresa es no-libre de rechazar ciertas indemnizaciones si el primero organiza piquetes frente a la segunda. Respecto de los vecinos, que tratan de imponer el, ostracismo (aislamiento) a los inconformistas, los habitantes de un edificio de los suburbios modernos son no-libres e apartarse de ciertas normas no escritas.

2/8
LIBERTAD SOCIAL
La libertad social no es lo opuesto simétrico de no-libertad social. Oficialmente yo no soy no-libre de pagar los impuestos sobre la renta; no obstante tampoco soy libre de pagarlos: más bien soy no-libre de rehusar el pago. Una relación de libertad se refiere a una serie o por lo menos a dos acciones, o tipos de acciones alternativas. Yo soy no-libre de hacer esto; yo soy libre de hacer esto o aquello. Un actor es libre de actuar en uno cualquiera de distintos modos, con tal que no haya otro actor que lo haga no-libre de realizar cualquiera de estas acciones. Por ejemplo, respecto a B; A, es libre de hacer X o Z, si B, no hace ni imposible ni punible para A, el hacer X o Z. “Libertad de voto significa libertad de votar o de abstenerse; pero “libertad de difundir la verdad” significa no-libertad de difundir opiniones “erróneas”. Además yo puedo ser libre de actuar de un modo o de otro con una persona o con un grupo, en tanto que otro actor me hace no-libre de entregarme a una de estas actividades. Oficialmente, los norteamericanos tienen la libertad de escoger cualquier religión o de no apegarse a ninguna, pero muchos norteamericanos son
no-libres de ser agnósticos (que sin negar la existencia de Dios, considera inaccesible la noción de los absoluto) respecto de ciertos grupos no oficiales que someten a los “ateos” a todo género de sanciones informales.
Se puede determinar con certeza, pero sólo ex post facto (posterior al hecho), si un actor era no-libre de hacer lo que hizo en realidad. Si el intento de A, de hacer X, fue fustado por B, o si A, logró hacer X, pero fue castigado por B, por haberlo hecho, se deduce por definición que A, fue, respecto de B, no-libre de hacer X. El hecho de que A, sea no-libre de hacer X, o el hecho de que A, tal vez sea o sería libre de hacer X o Z, son hipótesis empíricas que pueden sostenerse únicamente con cierto grado de probabilidad, dependiendo de la respuesta a preguntas como: ¿si hace X, B lo castigaría? Si el sesenta por ciento del total de los que en Francia sobrepasan los límites de velocidad son declarados culpables, los conductores franceses son en esa proporción no-libres de sobrepasar los límites de velocidad, sin tomar en cuenta cuántos sobrepasan esos límites y son multados y cuantos respetan la ley. La libertad social de una persona no depende de su comportamiento efectivo. Con frecuencia realizamos acciones que no somos libres de realizar (por ejemplo, sobrepasar los límites de velocidad) y nos abstenemos de acciones que somos libre de realizar (por ejemplo conducir a cualquier velocidad inferior al límite).

3/8
LIBERTAD SOCIAL Y OTRAS
RELACIONES SOCIALES.
Las relaciones de libertad y no-libertad impersonal o social pueden existir entre dos personas o grupos cualesquiera; por ejemplo, miembros de una familia, compradores y vendedores, parlamento y ejecutivo, Un Papa y el emperador, miembros del mercado común.
La libertad de un gobierno puede estar o no limitada por cualquier otro gobierno, una iglesia, una organización internacional, los propios ciudadanos, cualquier grupo de interés dentro o fuera de su territorio, etc. (¿Chile? ¿Es realmente “libre y soberano”?
La libertad política es una subcategoría de la libertad social y normalmente se refiere a la libertad de los ciudadanos o de las asociaciones respecto del gobierno. El interés por la libertad política en los diversos periodos de la historia se concentra en la libertad de religión, la palabra o de la prensa, de asociación (religiosa, política, económica), de participación en el proceso político (sufragio). La idea de libertad política ha sido la misma para cubrir la exigencia de libertad económica, de libertad de necesidades, de autodeterminación nacional. (Y ¿el libertinaje que permite la especulación? ¿Es una no-libertad?), etcéteras.
No-libertad y poder o control son categorías se interfieren. Impidiendo a A, hacer X, B, hace a A, no libre de hacerlo y controla su comportamiento. Si B, castiga a A, porque hizo X, A, era, respecto de B, no-libre de hacer X, pero B, no controló la acción X, de A; ya que su amenaza de castigo no logró intimidar a A, en su realización de X.
El influjo de una tercera forma de poder: B, logra, por ejemplo: persuadir a A, de votar por los demócratas, no limita la libertad de A, de ejercer su derecho a votar por los contrarios, (o por los que estime). En este caso las relaciones de poder y de libertad, subsisten entre la misma pareja de actores. Lo mismo sucede en las siguientes situaciones: B, controla a A, respecto de un campo limitado de alternativas; a, es libre dentro de ese campo.
Por ejemplo: el gobierno tiene el poder de obligar a los ciudadanos a prestar su servicio en las fuerzas armadas, pero pude dejarlos en libertad de someterse a la conscripción o de enrolarse como voluntarios. A, puede ser, con respecto de B, libre de hacer X, o porque B, no tiene ningún poder para limitar la libertad de A, o porque le permite a A, hacer X.
El congreso de EE.UU. es libre de legislar a su arbitrio respecto del presidente, en la medida en que este último decide no ejercer su poder de veto. Decir que la libertad de palabra prevalece en una determinada sociedad equivale a referirse a las siguientes relaciones de libertad y de no-libertad (y de poder) entre dos cualquiera de sus miembros. A y B: A, deja a B y B deja a A, en libertad de decir lo que quiera; respecto de B; A, es no-libre de impedirle expresar sus opiniones y viceversa; A y B, son no-libres de hacerlo, no sólo uno respecto del otro sino también respecto del gobierno, que protege el derecho de palabra a cualquiera.
Algunas libertades sociales están protegidas por derechos legalmente reconocidos y por los correspondientes deberes. Los conceptos relativos al comportamiento efectivo y al derecho deben ser distintos. Todos los conductores tienen el deber impuesto por la ley de no sobrepasar los límites de velocidad; son no-libres de sobrepasar estos límites en la medida en que son multados. Por ejemplo: el conductor A, que sobrepasó los límites de velocidad en una ocasión particular, sin ser descubierto, fue, en sentido conductista, libre de hacerlo en esa ocasión, a pesar de que no tenía ningún derecho reconocido legalmente en ese sentido. Si el 40% del total de los que en Francia sobrepasan los límites de velocidad escapan a la condena, los conductores franceses son en esa proporción social (aunque no legalmente) libres de sobrepasarlos.
Muchos creen que la democracia es “una sociedad libre”. Sin embargo, cualquier sociedad organizada está constituida por una red intrincada de relaciones particulares de libertades y de
no-libertades (no existe nada semejante a la libertad en general).
Los ciudadanos e una democracia pueden tener la libertad política de participar en el proceso político a través de elecciones “libres”. Los votantes, los partidos y los grupos de presión tienen por ello el poder de limitar la libertad de los candidatos que han elegido. La democracia exige que las “libertades civiles” sean protegidas por derechos reconocidos legalmente y por los correspondientes deberes, y estos últimos implican también limitaciones de libertad.
En un tipo ideal de dictadura, el gobernante tiene una libertad ilimitada respecto de sus súbditos, en tanto que estos últimos son totalmente no-libres respecto del primero. En una democracia las libertades y no-libertades, están distribuidas en una forma más igualitaria: Entre los distintos ramos del gobierno, el gobierno y los gobernados, la mayoría y la minoría. Igual libertad, no más libertad, es la esencia de la democracia.
4/8
OTROS SIGNIFICADOS
DESCRIPTIVOS.
Mientras la libertad social se refiere a dos actores y a sus respectivas acciones, la libertad de elección designa una relación entre un actor y una serie de acciones alternativas potenciales. “A, tiene la libertad de escoger X o Z”, significa que para A, es posible hacer X o Z; para A, tanto X, como Z, son accesibles o evitables; que A, efectuará X, con la condición de que elija hacer X. Por el contrario, si para A, es imposible o necesario hacer X, A, no tiene libertad de elección en cuanto a X. Es característica de este uso la definición de libertad de Hume entendida como:
“El poder de actuar o no actuar, de acuerdo con la determinación de la libertad”. La libertad de elección no es una condición ni necesaria ni suficiente de la libertad social.
Si A, no puede hacer X, es no-libre de hacerlo sólo si su incapacidad ha sido provocada por algún otro agente B.
De otra manera A, sigue siendo libre de hacer X, aun cuando no tenga la libertad de elección en cuanto a X.
La mayor parte de las personas, es incapaz, a pesar de tener la libertad, de convertirse en millonario o de obtener el premio Nobel.
La desocupación durante la recesión es un ejemplo de falta de libertad de elección,. No de falta de libertad social, a menos que la recesión pueda relacionarse causalmente, por ejemplo, con una política particular del gobierno.
El costo elevado de la duración de una transmisión televisiva hace que este medio sea inaccesible a la mayoría; esta circunstancia limita la elección, pero no la libertad de palabra. Cada uno es socialmente “libre de dormir debajo de los puentes” o en casa, incluyendo a los que no tienen casa, los cuales no pueden elegir en esta materia (en todos estos casos es probable que el actor evalúe las posibilidades que no tiene y no, la libertad que tiene). Por el contrario, tenemos libertad de elección respecto de la mayor parte de acciones punibles, y nos hacemos no-libres de realizarlas precisamente porque son accesibles.
Los indeterministas (doctrina filosófica contraria al determinismo, es decir que los acontecimientos no dependen de un proceso causal), sostienen con frecuencia que los seres humanos tienen “libre albedrío”, en la medida en que tienen libertad de elección; es decir que sus elecciones efectivas, y el comportamiento que se desprende de éstas, no están determinados causalmente sino que constituyen eventos accidentales. Los deterministas pueden negar, con perfecta coherencia, la doctrina del libre albedrío y sostener sin embargo que los hombres tienen a menudo libertad de elección. Argumentan que el hecho de que A, pueda hacer X, Z, no impide la posibilidad de explicar o prever la elección efectiva de A, gracias a las leyes (por ejemplo psicológicas o sociológicas) causales.
De una acción se puede decir que fue libre o no-libre cuando decimos: “Este asesinato fue una acción libre”; “Pagó los impuestos, pero no libremente”. El comportamiento involuntario es no-libre y tales son las acciones no deliberadas, por ejemplo las que el actor está condicionado a realizar. Las acciones voluntarias son libres, a menos que estén motivadas por el temor o por el castigo. La entrega de su propio dinero por parte de A, a B, que apunta su fusil contra A, es una acción no-libre (sin embargo es una acción voluntaria, determinada en parte por la amenaza de B, y en parte por el deseo de A, de salvar su vida). Pero, el rechazo de A, a ceder es una acción libre. Se puede hacer libremente lo que es no-libre de hacer. Por otra parte, si B, persuade a A, de hacer X, sin amenazar castigos, la acción X, de A, es libre. Algunas veces, sin embargo, se ha usado el término “libre” en un sentido más amplio en relación con acciones que son autónomas, o sea que están determinadas exclusivamente por las decisiones del autor y no por el influjo de los demás. Por ejemplo:
“La única libertad digna de este nombre es la de perseguir nuestro bien a nuestra manera…,” según lo razonado por el filósofo británico John Stuart Mill.
“Libre” a menudo no se refiere a características de las acciones sino de las personas. Se puede decir que una persona es libre en la medida que está dispuesta a actuar libremente o actuar autónomamente, o a desarrollar al máximo su propia capacidad. Por ejemplo, Marx profetizó una sociedad “en que el libre desarrollo de cada uno es condición del libre desarrollo de Todos”. La libertad, se convierte en sinónimo de autorrealización.
Con frecuencia se dice que la libertad consiste en hacer lo que uno quiere. Sería más preciso decir que un actor se siente libre en la medida en que hace lo que quiere. La libertad, como estado mental, es independiente de la libertad como estado empírico. Entre las cosas que quiero evitar puede haber alguna que soy libre y otra que soy no-libre de hacer. Algunos deducen en sentido de libertad del hecho de que se les deja en libertad cuando “huyen de la libertad”, para someterse a una autoridad que los condiciona a querer hacer lo que deben hacer. “El Gran Inquisidor”…, de Dostoievski, juega con estos dos significados de la palabra: “Hoy la gente está más convencida que nunca que tiene la absoluta libertad; sin embargo, nos ha entregado su libertad y la ha puesto humildemente a nuestros pies”.
A causa de la característica eufemista (en reemplazo) de la palabra libertad, los escritores se han visto inclinados frecuentemente a definirla respecto de aquellas relaciones, ya sea de libertad, o no-libertad, que suelen apreciar o recomendar a otros. Estas definiciones persuasivas de libertad, son útiles no como instrumentos de las ciencias sociales empíricas sino como expedientes retóricos; les dan a los escritores la posibilidad de manifestar en forma asertiva su punto de vista normativo. Por ejemplo, al afirmar que obedecer “a las leyes establecidas por la sociedad es ser libre”, como lo afirma el filósofo suizo
Jean-Jacques Rousseau trata de exhortar a los ciudadanos a obedecer esas leyes más bien que explicar el significado de la libertad. Las definiciones persuasivas de libertad se han usado para proponer cualquier género de ideología política, como lo ilustran los siguientes ejemplos:
5/8
LIBERTAD COMO PROTECCIÓN DE LOS DERECHOS FUNDAMENTALES.
El liberalismo clásico, desde el padre del liberalismo el británico John Locke hasta el líder del liberalismo británico Herbert Spencer y sus seguidores, sostenían que el Estado debería limitar la libertad de una persona cuando y sólo fuera necesario proteger los derechos fundamentales de otra persona (considerados frecuentemente como correspondientes a los derechos naturales). Por esto, “ninguna sociedad en que estas leyes no sean esperadas en su conjunto es libre” (J.S.Mill). Por el contrario, una sociedad es libre si se funda en estos principios de Laissez faire (expresión francesa: dejen hacer; dejen pasar). Y una persona que goza de estos derechos legalmente reconocidos y está sujeta a los correspondientes deberes es libre, aunque puede ser no-libre en otros aspectos y respecto de agentes distintos del gobierno, por ejemplo a causa de la explotación económica o de la presión social. Así, la Suprema Corte de los EE.UU. sostuvo que las leyes que fijaban un salario mínimo y un máximo de horas de trabajo violaban el principio constitucional de la libertad, porque estas reglas no eran necesarias para la protección de los derechos fundamentales y sí constituían limitaciones “arbitrarias” de la “libertad contractual” del dador del trabajo y del asalariado.

6/8
LIBERTAD COMO SALISFACCIÓN DE LAS NECESIDADES FUNDAMENTALES.
Los neoliberales ponen de relieve que el derecho de adquirir las cosas indispensables para la vida tiene poco valor para los que carecen de la posibilidad de adquirirlos; que el Estado debería hacerlos accesibles a todos: que esto exige por parte del Estado una limitación de la libertad individual a través de reglas sobre la salud pública, la instrucción y el bienestar. El bienestar social, no la libertad social, es un objetivo último; aunque usan la palabra “libertad” para designar este objetivo. “Libertad personal significa, en efecto, poder del individuo de asegurarse el alimento, el alojamiento y el vestido suficiente” (S.b. Webb). Por el contrario, los que son incapaces de conseguir lo que la sociedad debería hacerlos capaces de alcanzar, pero son libres de hacerlo respecto del gobierno, carecen de la “verdadera libertad”. “La libertad de carencias”, a diferencia de la libertad de palabra, no se refiere directamente a la libertad social sino a la ausencia de carencias y a la existencia de un nivel satisfactorio de vida para todos. Sólo en un sentido indirecto “los hombres menesterosos no son hombres libres” (F. D. Roosevelt). Éstos tienen poca libertad de elección y socialmente son no-libres respecto de los poderosos desde el punto de vista económico. La “libertad” se refiere no sólo al objetivo del bienestar sino también a cualquier limitación de libertad social considerada necesaria para alcanzarlo. La Suprema Corte, interpreta la libertad en el sentido de incluir las leyes sobre el salario mínimo y otras “reglas y prohibiciones razonables impuestas por el interés de la comunidad”. La “libertad” incluye la n´-libertad social deseable y excluye la libertad social deseable.

7/8
LIBERTAD COMO GOBIERNO BASADO EN EL CONSENSO.
La definición persuasiva de libertad como gobierno basado en el consenso se usa para manifestar la norma de que el gobierno debería basarse en el consenso de los gobernados, y esto significa, ordinariamente, gobierno representativo y legal de la mayoría.
Por ejemplo: “La libertad del hombre en la sociedad consiste en no estar bajo otro poder legislativo fuera del establecido por el Estado por consenso común (Locke).
Bajo este sistema los hombres son libres porque su libertad está limitada sólo por disposiciones en cuya promulgación estaba en libertad de participar. Con un ligero cambio la libertad deja de basarse en el deber del Estado de ser sensible a la voluntad de los ciudadanos de obedecer las disposiciones del gobierno que reflejan la voluntad de la mayoría o de la “voluntad general”. Según Rousseau, los hombres son libres si cumplen libremente esta obligación o si han sido “obligados a ser libres”. Y de este modo la libertad llega a referirse no ya al hecho de actuar de ninguna otra manera que de la prescrita por la autoridad.

8/8
LIBERTAD COMO CONSTRUCCIÓN MORAL.
Las definiciones de libertad consideradas hasta aquí incluyendo también las persuasivas, se componen, se componen totalmente de términos descriptivos. Sin embargo las definiciones de libertad incluyen con frecuencia términos étnicos, como “justo”, “deber” o “virtud”. En esos casos no sólo el término por definir (libertad) sino también la expresión definitoria tienen significado valorativo. Por ejemplo: “La libertad puede consistir únicamente en poder hacer lo que debemos hacer” (Montesquieu). Del mismo modo se dice frecuentemente que una persona es libre si no actúa libremente o si desarrolla sus capacidades sino si realiza “lo mejor” o “lo esencial” de sí misma.
Por ejemplo: “La libertad se puede definir como la afirmación por parte de un individuo o de un grupo de su propia naturaleza” (Laski).
Algunos han sostenido que es sumamente probable que si a alguien se le deja en libertad de elegir por sí solo realice su propia naturaleza. De acuerdo con otra tradición que, partiendo de Platón, a través de los estoicos y el pensamiento cristiano llega al neohegelismo, el hombre alcanza la forma más alta de autorrealización sometiéndose a alguna norma moral impuesta desde el exterior por alguna autoridad religiosa o política, o por el propio “yo superior” que originariamente se identifica con la fe, la razón o la conciencia moral. “Llamo libre al que se deja guiar únicamente por la razón” (Spinoza). “La obediencia a una ley que nosotros mismos prescribimos es libertad” (Rousseau).
La libertad deja de designar la ausencia de limitaciones desagradables para designar la existencia de limitaciones agradables. “En efecto, no adquirimos la libertad apagando lo que deseamos, sino destruyendo nuestro deseo” (Epicteto). En síntesis, la libertad es la no-libertad de hacer el mal, en tanto que la libertad de desviarse del camino descrito es licencia. “Si a todos se les concediera una licencia desenfrenada de palabra o de escrito, no quedaría nada de sagrado e inviolado (… ) De este modo, la licencia ganaría lo que la libertad determinaría por perder” (Encíclica: Libertas).
Si se usa “libertad” como etiqueta para las preferencias morales o políticas de cada uno, el esfuerzo de cada cual por la libertad sería vano. Todos estarían de acuerdo en que la libertad es el bien supremo, pero no estarían de acuerdo en ninguna otra cosa. Un desacuerdo significativo sobre el valor de la libertad presupone un acuerdo sobre el significado de libertad en términos no valorativos. El concepto de libertad social proporciona una base adecuada para una discusión fructífera sobre los aspectos tanto normativos como empíricos de la libertad. En cuanto a los sectores a los que se les debería ampliar o limitar la libertad social, habrá opiniones divergentes, dependiendo del valor que se les asigne a otros fines sociales, como la igualdad, la justicia o el bienestar, que pueden competir con el fin de la libertad.
BIOGRAFÍA
R. Aron, Ensayo sobre las libertades, 1965, Madrid Alianza, 1969.
C. Bay, La estructura de la libertad 1958, Madrid, Tecnos, 1961.
I. Berlín, Libertad y necesidad en la historia 1969, Madrid, Revista Occidente, 1974.
J.P. Day, Theats, offers, law, opinión and liberty en American Philosophical Quarterly, XIV, 1977.
C. Friedrich (comp), Liberty, Nueva York, Atherton, 1962.
F.A. von Hayek, Fundamentos de la libertad 1960, Madrid, Unión, 1969.
F. Oppenheim, Dimensioni della libertà 1962, MIlan, Feltrinelli, 1964.
Political concepts: A reconstruction, Chicago, University of Chicago Pres, 198.
W. Parent, Some rewsent work on the concept of liberty, en American Philosophical Quarterly, XI, 1974.
A. Passerin d’Entrèves (com), La libertà politica, Milán, Comunità, 1974.
H. Steiner, Individual liberty, en Proceedings of the Aristotelian Society, LXXV, 1975.

El Fortín del Estrecho