La enseñanza técnico industrial fue creada y puesta en marcha en los años 40 bajo la presidencia de Don Pedro Aguirre Cerda. “Gobernar es Educar”. En esos años, los pitucos, hoy cuicos, decían: “A las escuelas industriales ingresan los roteques que quieren ser algo en la vida”. Esos, eran tiempos de esperanza, de optimismo creador, todo era posible frente aun yunque, “había que ser firme para forjar un país” “había que aprender a trabajar y crear, para lograr la autosuficiencia de la Patria”. Los maestros, todos técnicos e ingenieros y profesores de Estado, profesionales en su tema. Calidad, excelencia, responsabilidad, respeto, dignidad. Orgullo de hacer. En esos años, un trabajador chileno egresado de una escuela industrial, armado de una lima, un pie de metro o frente a una maquina, era igual en eficiencia e iniciativa a un trabajador del mundo desarrollado…Cuán lejos están aquellos tiempos cargados de optimismo. De ahí para adelante, todos, según sus intereses, uno a uno todos los gobiernos han hecho lo posible por destruir, minimizar y desviar la enseñanza industrial hacia el olvido, hacia lo innecesario: (Importar es más barato, lo importado es mejor, los gringos saben lo que hacen, el mercado nacional es muy pequeño, nosotros solamente somos productores de materias primas, con el cobre no queremos más, no hay caso con lo importado siempre será mejor, la mano de obra chilena es muy cara, para que decir el costo de los fletes, bueno, que le vamos a hacer ellos son más inteligentes, vendámosles el país privaticemos todo total hoy, somos una nación globalizada). Hoy, tenemos resuelto el sistema de la fibra óptica, el Internet, la telefonía celular ¿…? Y quién sabe con cuánto cachureo más nos engrupirán, para requete convertirnos cada vez más en eficientes dependientes drogadictos de la autocolonización, hasta lograr desmenuzar todas las fibras de nuestra identidad. Y con la chiva del progreso y el esnob nos dejamos hipnotizar por el idiotismo del consumo de basura. “Pero, eso es muy bueno para el país…” Se acabará el cobre y no lograremos hacer una paila. Como sea, y aunque no queramos, la avalancha viene, Dios proteja a Magallanes. No olvidemos las palabras del Creador “AYÚDATE QUE YO TE AYUDARÉ” Nadie nos ayudará a forjar la llave que nos permitirá salir del laberinto en que nos ha metido nuestra ineficiencia y nuestra ingenuidad.
Si a la enseñanza industrial se le diese la real importancia preparando primero a los futuros trabajadores en el arte de usar el alma conectada a las manos, otro gallo cantaría. Toda enseñanza laboral debe comenzar por sus etapas primarias: primero, todo a mano. Si se convirtiera la enseñanza industrial en institutos de arte y oficios…, si eso fuera realidad, de aquí a cinco años se podría ver el resultado en la calidad artesanal y nuestra región dejaría de ser gris. Siempre me he preguntado ¿por qué a la enseñanza industrial regional no se le ha agregado la disciplina textil o el dominio en la confección de artes de pesca, curtiembre, cerámica o un pesquero escuela? Mucho se habla del Internet, mucho se viaja a Europa, pero los resultados de esas experiencias no se notan en el desarrollo. ¿Por qué no invertir en la extensión universitaria a los barrios? ¿Por qué la enseñanza industrial no recibe el aporte del proyecto Monte Grande?
Como sea, en estos tiempos de las cuentas alegres de los convenios de libres comercios, este aniversario de nuestra Escuela Industrial, debería hacer reflexionar a los involucrados. Un laboratorio industrial dirigido por ingenieros docentes sería un buen comienzo. El plan DUAL no es un buen plan, es un sistema acomodaticio que soluciona solamente el problema político-administrativo, pero los grandes afectados son los futuros hombres de trabajo. Es común ver a estos alumnos trabajando sin la debida protección, casco guantes, zapatos de seguridad, gafas etc., y por otro lado se pretende prevenir accidentes con altos costos en promoción.
La disciplina laboral se aprende en la escuela y a su tiempo de acuerdo a la edad, antes de ese tiempo con este sistema sólo se aprende mañoserías que afectan nuestro desarrollo.

TODO POR LA AUTONOMÍA ECONÓMICA Y POLÍTICA DE MAGALLANES.

Antonio S. Deza González, Director

El Fortín del Estrecho